1. La realidad es poliédrica ¿qué aspecto vas a relatar?
Un concepto fundamental en la narratología es que cualquier historia es la información en bruto, es la versión objetiva y veraz de la información, pero un relato es solo una de las maneras en que se cuenta la historia. Dicho de otro modo, hay tantas realidades como relatos se puedan armar a partir de una historia, esto implica que los relatos son sesgados, parciales e intencionados, pero siempre coherentes y verosímiles.
No lo confundamos con la tergiversación, hacemos relatos para potenciar los aspectos que más nos interesan de la historia.
2. Espacio y tiempo, ¿cómo vas a ordenar toda la información?
Todo relato tiene una estructura. Un orden temporal y una situación espacial. Por ejemplo, un guionista ordena los hechos según actos para introducir y presentar los hechos, relaciones y datos; y resolver luego las situaciones obteniendo unas conclusiones.
Las infografías narrativas deben replicar esta estructura de introducción, nudo, desenlace. Tu lector agradecerá un relato con unas pautas que permitan satisfacer sus expectativas.
3. El punto de vista, ¿quién cuenta la historia?
Pregúntate qué es lo más relevante de la historia y elige quién va a contarla. El foco, o punto de vista, es básico para que quede claro por qué narramos. No será igual que se cuente desde la óptica de un protagonista, que tiene una implicación directa en los hecho a que lo haga un narrador en tercera persona, que se distancia para objetivar los hechos. El que cuenta la historia elige el conflicto (detonante) y cómo este se resolverá (clímax). Estos dos factores son clave para capturar la atención.
4. Apuesta por la redundancia, ¿es importante la precisión o lo es la verosimilitud?
A menudo abrumamos a los lectores con datos que no siempre son capaces de explorar e interpretar. En las infografías narrativas todas las informaciones están conectadas, están subrayadas y persiguen una finalidad común.
Una vez establecida la prioridad del mensaje, sabrás qué elementos necesitan repetirse para calar en tu espectador y cuáles otros son complementarios o, incluso, prescindibles. La redundancia juega a nuestro favor.
5. ¿Quieres atención? Hazlo emocionante.
Para hacerlo emocionante debemos otorgar prioridad a los conflictos, para ello hay que identificarlos y ponerlos en valor. Destacar un problema de partida y acompañar al lector hacia su resolución en el lugar más relevante de la composición. A nuestro favor juegan las decisiones gráficas que tomamos.
Las soluciones icónicas van a facilitar la conexión empática. Representar tal y como percibimos el mundo agiliza las interpretaciones, nos permite proyectarnos emocionalmente con mayor facilidad en las historias. Piénsalo, si abundamos en la síntesis abstracta percibiremos la infografía como un elemento etéreo e inmaterial, sin arraigo en nuestra realidad.
Usa elementos gráficos que resulten familiares a tu público, pues facilita que sean comprensibles. Incluso, ve más allá, y aprovecha el poder retórico de la imagen, las metáforas visuales refuerzan el mensaje. Y no te olvides de que el color es tu aliado, es el elemento más emocional que tiene la sintaxis visual.
Si quieres despertar el pensamiento narrativo recuerda estas claves:
→ Parte de tu propia interpretación de la historia, una idea sencilla pero poderosa
→ Elige el punto de vista del relato, de modo que exprese intenciones particulares cuando lo armes
→ Planifica una estructura de relaciones y establece anclajes espacio-temporales
→ El avance de los hechos debe implicar transformación, que presenten algún tipo de conflicto y que lo resuelva
→ Busca una potente presentación visual con predilección por los iconos y el color, incluso potenciada por metáforas visuales
Busca la redundancia en los datos, hazlos livianos y comprensibles.
Recuerda que los cerebros quieren emocionarse empatizando con sus semejantes, quieren imaginar todos los momentos de ese relato y quiere confirmar sus expectativas al ver como avanza. Si estas claves despiertan tu curiosidad, lo harán también en tu público, capturando su atención y contribuyendo a difundir tu infografía narrativa. ¡Te contamos más en nuestro Máster en Visualización de Datos y Diseño de la Información!