Maija Isola (1927–2001)
Maija Isola destacó como diseñadora textil gracias a su extraordinario enfoque en el uso del color y las formas. Los estampados de colores vibrantes que creó para Marimekko, una emblemática casa de diseño finlandesa, continúan resultando modernos en la actualidad.
Nacida en Finlandia en 1927, Isola demostró una pasión innata por el arte y el diseño, lo que le llevó a estudiar en la Escuela Central de Arte Industrial y más tarde en la Universidad de Arte y Diseño de Helsinki. Pionera en el diseño textil contemporáneo, su obra se distingue por su estilo geométrico y minimalista.
Vivió una vida alejada de convencionalismos que le llevó a recorrer Europa, el norte de África y América. A partir de sus viajes y experiencias vitales, Isola encapsuló la esencia de diversas culturas en sus patrones y colores, creando más de 500 estampados a lo largo de sus más de 40 años de carrera en Marimekko.
Con sus originales patrones gráficos, Isola revolucionó la industria textil y llevó a Marimekko a alcanzar renombre internacional. El emblemático estampado Unikko (amapola) representó un hito en su carrera, además de convertirse en símbolo icónico de la efervescente cultura pop de los años 60 y en elemento central de la identidad de la marca.
El legado de Maija Isola trasciende la industria textil, infundiendo vitalidad y carácter tanto en la moda como en el diseño de productos para el hogar. Sus creaciones perduran en el tiempo, inspirando y deleitando a las nuevas generaciones.
Marianne Brandt (1893–1983)
«Al principio, no fui recibida con agrado; no había lugar para una mujer en un taller de metal, sentían. Me lo admitieron más tarde y, mientras tanto, expresaron su descontento dándome todo tipo de trabajo monótono y sombrío”. — Marianne Brandt
Artista y diseñadora multidisciplinar, Marianne Brandt fue una visionaria de enorme influencia en el diseño del siglo XX, al que contribuyó desde disciplinas diversas como el diseño industrial, la metalurgia, la fotografía o la pintura.
Nacida en Alemania en 1893, Brandt estudió pintura antes de ingresar en la Bauhaus, la famosa escuela de diseño, arquitectura y artes aplicadas. Trabajó cerca de figuras influyentes como Walter Gropius, László Moholy-Nagy y Wassily Kandinsky. Sus innovadores diseños en metal, especialmente en objetos domésticos y accesorios de iluminación, le valieron un amplio reconocimiento, convirtiéndose en la primera mujer en dirigir el taller de metal en la Bauhaus.
Fue allí donde desarrolló sus creaciones más icónicas, caracterizadas por líneas limpias, formas geométricas y elegancia funcional. Entre ellas destaca la lámpara de noche Kandem, reflejo del ethos de la Bauhaus de combinar arte, tecnología y producción en masa. Brandt también destacó como fotógrafa y pintora, experimentando con la interacción entre luz, textura y forma de manera abstracta.
Tras su salida de la Bauhaus en 1928, Marianne Brandt continuó su labor como diseñadora y artista, colaborando con diversas empresas y exhibiendo su obra a nivel internacional, a pesar de los desafíos a los que se enfrentó como mujer creativa en un mundo de hombres.
Marianne Brandt desafió las convenciones sociales y exploró nuevos horizontes en el campo del diseño, creando piezas fundamentales que contribuyeron al acervo cultural del movimiento moderno. Su influencia perdura en la actualidad, como evidencia la presencia de su obra en el prestigioso MoMA de Nueva York.
Kazuyo Sejima (1956–presente)
«Sueño con que la arquitectura pueda aportar algo a la sociedad contemporánea. La arquitectura es cómo las personas se encuentran en el espacio». — Kazuyo Sejima
Kazuyo Sejima, una destacada arquitecta contemporánea japonesa, es conocida por su estilo minimalista, el cual se distingue por el uso de líneas limpias y una magistral utilización de la luz natural en beneficio de quienes habitan los espacios que diseña.
Nacida en 1956, Sejima se graduó como arquitecta en la Universidad de Mujeres de Japón en 1979. Al principio de su carrera, trabajó con Toyō Itō antes de fundar su propio estudio en 1987. Más tarde, en 1995, cofundó SANAA junto a Ryue Nishizawa, estudio referente de la arquitectura contemporánea. Entre sus proyectos más notables se encuentran el 21st Century Museum of Contemporary Art (Japón), Rolex Learning Center (Suiza), Louvre Lens (Francia), y el Museo Sumida Hokusai (Japón).
Su práctica destaca por su innovadora aplicación de los diagramas, una técnica que busca superar las limitaciones tradicionales de la arquitectura y explorar nuevas formas de interacción entre lo virtual y lo real. Sejima aboga por difuminar las fronteras entre el interior y el exterior, creando atmósferas serenas y abstractas. Su estilo refleja una meticulosa atención al detalle y fusiona de manera armoniosa la estética y la funcionalidad, concibiendo espacios abiertos y fluidos que fomentan la colaboración.
En 2010, Sejima y su socio en SANAA fueron galardonados con el prestigioso Premio Pritzker, convirtiéndose en la segunda mujer en recibir este premio. Ese mismo año, fue la primera mujer en dirigir la Bienal de Arquitectura de Venecia.
La arquitectura de Kazuyo Sejima promueve la flexibilidad y adaptabilidad, estableciendo conexiones entre los espacios y sus ocupantes. Esta filosofía de diseño, transmitida a través de su obra y actividad académica, continúa inspirando a las nuevas generaciones de arquitectos.
Clara Porset (1895–1981)
“Recoger la herencia cultural –como cualquier otra herencia– significa algo más que recibirla pasivamente; significa acogerla como una incitación al movimiento. No inhibirse frente a ella, sino ponerla en acción. Porque la cultura es vida y es transformación, no un trofeo irrevocable”. — Clara Porset
Clara Porset, arquitecta y diseñadora de mobiliario, fue una visionaria cuyo trabajo reflejó su herencia cubana y su exposición al modernismo europeo. Creía firmemente en el poder del diseño para mejorar la vida de las personas y fortalecer su identidad cultural.
Nacida en Cuba en 1895, Porset estudió en Estados Unidos antes de trasladarse a París, donde se expuso al movimiento modernista emergente que influiría profundamente en su filosofía de diseño. En 1936, se trasladó a Ciudad de México, donde se convirtió en una figura clave del modernismo mexicano, colaborando con destacados arquitectos como Luis Barragán.
En México, Porset se involucró en movimientos políticos desde donde promovió el funcionalismo como medio para reducir las diferencias sociales. Abogaba por el uso de materiales y técnicas artesanales mexicanas, combinándolos con simplicidad en el diseño y técnicas industriales para facilitar su producción en masa. Su visión promovía un diseño «simple, hermoso y funcional».
Su silla «Butaque» transformó un asiento mexicano tradicional en icono mestizo al simplificar su forma e incorporar nuevos materiales como acero y cuero, consolidando a la diseñadora como figura clave del funcionalismo mexicano. A pesar del desafío de ser una mujer de color en un campo mayoritariamente masculino y eurocéntrico, su talento y determinación le llevaron al reconocimiento internacional, exponiendo su obra en la muestra «Arquitectura Latinoamericana desde 1945» del MoMA de Nueva York.
El legado de Clara Porset perdura también a través de unas becas en su honor para formar a mujeres diseñadoras en la Universidad Autónoma de México. Su devoción por la cultura indígena y su compromiso con la preservación de la tradición la han convertido en referente para diseñadoras y arquitectas en todo el mundo.
Anna Castelli Ferrieri (1918–2006)
«No es verdad que lo útil sea bello. Es lo bello lo que es útil. La belleza puede mejorar la forma de vida y el pensamiento de las personas». — Anna Castelli Ferrieri
Arquitecta, urbanista, diseñadora industrial y empresaria, Anna Castelli Ferrieri fue una figura emblemática del diseño contemporáneo italiano de los años 60. Su visión perdura a través de sus creaciones, que han logrado mantener su relevancia tras el paso del tiempo.
Nacida en Milán en 1918, Castelli Ferrieri fue la primera mujer graduada en Arquitectura en el prestigioso Instituto Politécnico de Milán. En 1949, junto a su esposo Giulio Castelli, fundó Kartell, emblemática casa de diseño italiano. Bajo su liderazgo como directora de diseño, la marca se convirtió en icono de la modernidad. Como arquitecta, diseñó la sede de Kartell, inaugurada en 1968.
Parte de la emblemática generación de diseñadores italianos del siglo XX, junto a figuras como Ettore Sottsass, Joe Colombo y los hermanos Pier y Achille Castiglioni, Castelli Ferrieri contribuyó a la revolución del diseño moderno, adoptando nuevas tecnologías y materiales como el plástico de alta calidad, con funcionalidad, minimalismo y belleza como principios fundamentales.
Otro hito en su carrera fue la creación del sistema de almacenamiento modular Componibili en 1969. Este innovador diseño, compuesto por compartimentos cilíndricos apilables, transformó las soluciones de almacenamiento y se convirtió rápidamente en un clásico. A día de hoy, sigue siendo el producto más vendido de la marca, apreciado por su versatilidad atemporal.
A lo largo de su trayectoria, Castelli Ferrieri recibió numerosos reconocimientos por su contribución al diseño italiano. Su trabajo ha sido exhibido en museos y galerías de todo el mundo, como el MoMA, el Pompidou y el Design Museum de Londres, consolidando así su legado como una de las diseñadoras más influyentes del siglo XX.
