Cómo afecta la IA a los flujos de trabajo de las agencias creativas

May 08, 2025 por Armand Montserrat

La IA ha venido para quedarse.

Y esta es una afirmación que difícilmente podemos negar. La pregunta es a quién y cómo va a afectar la Inteligencia Artificial en su día a día. La respuesta es fácil: a todos y de muchas maneras, pero sobre todo modificando y agilizando los procesos, para hacer más eficientes las tareas humanas y elevar los resultados.

Y esto no es más que una conclusión fruto de la comparación sistemática de resultados con y sin IA.

En concreto, en el mundo creativo, en agencias de diseño y comunicación, las herramientas de IA están tan integradas en nuestro día a día que su uso ya no es una opción, sino un imperativo para mantener la competitividad. Y esto está impactando múltiples áreas y tareas.

A continuación, veremos cómo lo hace.

flujos trabajo IA

Afectaciones de la IA en tareas creativas

En la recogida de información y consulta de datos y creación de drafts o briefings

Hace tan sólo unos años, las reuniones se basaban en apuntes manuales, grabaciones dispersas y la ardua tarea de transcribir o resumir al final del día.

Ahora, plataformas como Google Meet y Microsoft Teams cuentan con asistentes inteligentes capaces de transcribir en tiempo real, resumir puntos clave y hasta traducir automáticamente lo hablado. Con un simple click, el equipo recibe un informe completo con las decisiones tomadas y las tareas pendientes.

Y si queremos ir un paso más allá, herramientas como Notion AI o NotebookLM organizan esa información en bases de datos, generan guías de estudio o incluso proponen esquemas de trabajo, liberando a planners y product managers de tareas repetitivas y permitiéndoles dedicarse a la estrategia.

En la creación de piezas digitales, copys, imágenes o vídeos

En el departamento digital, la revolución generada por la Inteligencia Artificial Generativa es palpable en cada texto y cada gráfico. Modelos como ChatGPT, Google Gemini y otros LLMs se han convertido en compañeros de redacción: corrigen la ortografía y la gramática, sugieren variaciones de tono, elaboran planes de contenidos e incluso proponen copys para campañas.

Cuando llega el momento de analizar datos, plataformas como Metricool extraen métricas y la IA transforma esas cifras en gráficos y conclusiones accionables con tan solo definir el prompt adecuado.

Sin embargo, no basta con “soltar” la tarea: el verdadero valor reside en la formación de profesionales capaces de formular preguntas precisas y de interpretar los resultados, lo que hoy conocemos como prompt engineering.

Capacitar al equipo en estas competencias es, sin duda, uno de los grandes retos y, a la vez, una de las mayores oportunidades para las agencias.

Si nos centramos en el mundo creativo podríamos estar horas analizando herramientas específicas la verdad. Hasta hace muy poco, los diseñadores recorrían interminables catálogos de stock fotográfico —Shutterstock, Getty Images, Dreamstime— buscando la imagen exacta para cada campaña. Hoy, esa búsqueda se ha transformado por completo. Las suscripciones han pasado a ser de plataformas de Inteligencia Artificial generativas como Midjourney, Flux, Ideogram, Runway o Pika, diseñamos imágenes únicas, iconos, vectores e incluso animaciones de forma mucho más rápida y efectiva. Al crear en lugar de buscar, no solo optimizamos el tiempo, sino que abrimos un abanico de posibilidades estilísticas infinitas.

Este flujo de trabajo ha supuesto una mejora radical en la fase de bocetado: una vez aprobado el briefing creativo, podemos generar varios mood boards “a medio hacer” que ilustren distintas direcciones visuales, compartirlos con el cliente y ajustar el recorrido antes de invertir en producción final. De este modo, reducimos el riesgo de desalineación creativa y aceleramos el proceso de validación.

Pero la IA en creatividad va más allá de imágenes: la generación de tipografías, el diseño de interfaces UX/UI y el brainstorming de ideas se han enriquecido con algoritmos capaces de proponer paletas de color, jerarquías tipográficas y flujo de interacción. Incluso la redacción de textos publicitarios —esos pequeños “copys” que marcan la diferencia— puede apoyarse en modelos generativos que sugieren titulares, descripciones e incluso eslóganes basados en el perfil de la marca y el público objetivo. Esto no significa que el factor humano haya desaparecido, sino que el talento creativo se dedica ahora a filtrar, adaptar y enriquecer las propuestas de la IA, elevando la calidad final y disminuyendo tiempos muertos.

IA trabajo creativo

Una transformación que va más allá de la creatividad

Lo más interesante es que esta transformación no es exclusiva de las agencias de comunicación: la estamos viendo en productoras de vídeo, estudios de sonido y locución, despachos de animación 3D, especialistas en renderizado, interioristas, traductores y profesionales del marketing.

Cada sector explora cómo la IA puede aportar valor: desde la automatización de ajustes de audio hasta la generación de maquetas de interiores o la traducción instantánea con matices culturales.

Naturalmente, las herramientas clásicas siguen siendo fundamentales. El paquete Adobe —Photoshop, Illustrator, InDesign— evoluciona incorporando funciones inteligentes que agilizan desde la selección de objetos hasta la generación de estilos. Sin embargo, la industria gráfica tradicional, especialmente el mundo de las imprentas y el packaging, se enfrenta a retos técnicos: preparar artes finales según tintas, tramados y formatos físicos estándar que no admiten aún automatizaciones tan avanzadas.

Ahí radica un punto de inflexión: combinar la precisión artesanal con las ventajas de la IA exigirá tiempo, colaboración entre creativos y técnicos, y la adopción de nuevos estándares gráficos.

La adaptación es fundamental, a través de la formación continua

Frente a este panorama, la adaptación es la única opción. Nos toca cultivar la curiosidad, experimentar sin miedo, formarnos en herramientas y metodologías IA, y aprender a fusionar flujos tradicionales y generativos. Solo así evitaremos que esta ola tecnológica nos arrolle y, en cambio, podremos surfearla con soltura, obteniendo procesos más eficientes, producciones más creativas y resultados de mayor impacto.

Armand Montserrat

Director del departamento de diseño de Alagama Agencia y director del Máster en Inteligencia Artificial Generativa de SHIFTA.

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