Sobre la perfección y dejar de lado los miedos a equivocarse, hablamos en esta nueva entrega de “SHIFTA con el Talento Creativo” junto a Patricia Gil, diseñadora multidisciplinar que, lejos de tener miedo, aprovecha las circunstancias que se le van presentando en la vida para ir avanzando en la carrera por cumplir su sueño profesional: tener un negocio propio que cubra todas las necesidades de diseño de una marca.
1. ¿Cómo han sido tus inicios en el mundo del diseño?
No me recuerdo sentándome a decidir la carrera, sino que simplemente lo tuve súper claro desde el principio. Empecé estudiando el grado de publicidad y relaciones públicas y traté de hacer cosas lo más variadas posibles para ir viendo qué es lo que más me gustaba y hacían dónde quería ir dentro de un sector tan grande y amplio como es el de la publicidad y la comunicación.
Después de varias experiencias variadas, estando en una agencia de marketing me di cuenta de que me estaba desviando poco a poco de lo que realmente quería hacer: diseñar y desarrollar mi creatividad. Así que tras una reflexión bastante dura, decidí dejar el trabajo y me puse a formarme y hacer cursos de todo lo que me parecía interesante: diseño, interiorismo, retail, ilustración… para poder reencontrarme con mi pasión por la creatividad y volver a confiar en mí.
Mientras estaba acabando de estudiar, llegó la pandemia y al no tener trabajo, decidí abrir un perfil en una plataforma de freelance para ver si encontraba trabajo. Para mi sorpresa, a las dos semanas de darme de alta, me empezó a escribir gente y vi que eso tenía rodaje, así que me di de alta como autónoma.
Siempre había tenido ese gusanillo de emprender y tener un proyecto propio, pero no sé por qué, nunca lo hice hasta que las circunstancias casi me obligaron a hacerlo.
2. ¿Qué tipo de proyectos llevas a cabo?
Gracias a todos los años de formación, he intentado crear mi perfil multidisciplinar con el objetivo de en un futuro, poder abarcar diferentes proyectos. No necesariamente hacerlos yo por completo, porque eso no es asumible en muchos casos, sino para entender qué está haciendo la gente de mi alrededor y poder dar soporte en todos los procesos. Sin embargo, lo que más he estado haciendo últimamente han sido proyectos de branding, porque lo que me encanta y me llena, es crear marcas desde cero.
3. Cuando recibes un proyecto, ¿qué es lo primero que tienes en cuenta?
Aparte de que sea una propuesta que vaya acorde con mis valores, que es algo instantáneo que ni siquiera me paro a pensarlo, son las posibilidades y el potencial que le veo al proyecto para ver qué le puedo aportar y si soy capaz de darle al cliente lo que necesita en ese momento. De igual forma, otra cosa que también tengo en cuenta antes de empezar un proyecto es la persona con la que estoy tratando para hacerlo y con la que voy a estar en contacto. Al final por muy guay que sea un proyecto y por mucho potencial que pueda tener, si la persona con la que estás tratando no tiene educación, el proyecto se va a ver perjudicado y no va a salir tan bien como podría. Creo que, en este sentido, es importante marcar límites con los clientes desde el principio para que eso luego no suponga un problema.
4. ¿Cómo sueles abordar los proyectos?
Evidentemente, lo primero y más importante es contextualizar el proyecto y cuál es su punto de partida. En este punto, también tengo muy en cuenta, nuevamente, la persona que hay detrás del proyecto para plantear un proyecto que le encaje. Además, lo que he ido aprendiendo con el tiempo, es que es muy importante fijar un punto de partida claro a nivel visual. Que los clientes me pasen referentes o crear un moodboard para saber el estilo que les gusta, aunque después éste vaya variando, pero así no alejarme mucho de lo que realmente quieren y tener que empezar de cero.
5. ¿Qué objetivo persigues con los proyectos que realizas?
Principalmente, lo que quiero a corto plazo es mejorar la imagen de las marcas para que, no solamente, mejore su notoriedad y sus ventas, sino que los clientes estén contentos con la marca. Es decir, quiero crear marcas que tú comprarías, que te llame la atención y de la que tú te sientas dueño, ya que al final tú eres el que marca la esencia de una marca. A partir de aquí, busco la practicidad ya que, en ocasiones, los clientes quieren marcas que luego nos les van a ser útiles. Entonces, en estos casos, me toca guiarlos en poco más para que el diseño se ajuste a lo que quieran y, sobre todo, tenga sentido.
6. ¿Crees que el diseño puede contribuir a mejorar la sociedad?
Personalmente, por mi propio estilo de vida y mis valores, creo que sí, que todos tenemos la posibilidad como individuos de tener algún impacto positivo en la sociedad. En el caso del diseño, se trata de una disciplina creativa e innovadora que está muy relacionada con el progreso y, por tanto, tal y como yo lo veo, tiene que ir en consonancia también con el progreso social y medioambiental. Creo que tenemos que llegar a un punto en que tengamos interiorizado a nivel individual que las pequeñas decisiones que vayamos tomando vayan acorde con el progreso de la sociedad en todos los sentidos.
Por ejemplo, en mi caso, los únicos productos que vendo son unas tote bags y, pese a que, sé que hay alternativas de materiales muy baratos, también son muy perjudiciales para el medio ambiente, así que yo trabajo con alternativas de muy buena calidad y de materiales 100% reciclados. En este punto, también creo que es muy importante apoyar a pequeños comercios locales que apuestan por materiales menos agresivos con el medio ambiente. Por eso, a mis clientes, sobre todo en el caso de los internacionales suelo aconsejarlos y darles las directrices de impresión necesarias para que puedan hacerlo con proveedores de proximidad.
7. Si te tuvieras que quedar con un proyecto de todos los que has hecho hasta ahora, ¿con cuál lo harías?
A nivel visual y de resultado, uno de mis proyectos favoritos es el que hice para una marca de China que abrió una tienda en un edificio emblemático del país de varias plantas, que quería poner el foco en el arte, la cultura y la belleza. Para este proyecto, me encargué de hacer toda la identidad visual de la marca y las aplicaciones de marca que necesitaban, como, por ejemplo, los packagings del take away.
8. ¿Cómo te mantienes actualizada de las últimas tendencias y herramientas?
Tal y como yo lo veo, la formación continua es muy importante, no solo para mantenerte actualizado sino también para no estacarte a nivel técnico ni emocional y hacer cosas nuevas. Creo que es importante seguir formándote no solo en disciplinas que ya abordas sino en otras nuevas también, ya que eso amplia tu forma de ver las cosas.
9. Finalmente, ¿qué consejo le darías a alguien que quiere dedicarse a lo mismo que tú?
El consejo más grande que podemos darnos a cualquiera, incluso a nosotros mismos, es no tener miedo al fracaso y a que las cosas no nos salgan siempre como queremos. La perfección no existe. No esperes a estar siempre súper seguro de lo que estás haciendo, al final tenemos que salir, vivir, trabajar… con lo que tenemos ahora. Luego ya iremos mejorando poco a poco, pero no esperes a tenerlo todo perfecto porque entonces nunca lo vas a hacer.